Agencia Excélsior. Abril 01, 2025.
El cáncer colorrectal ya es la primera causa de muerte por tumores malignos en entidades como Ciudad de México, Nuevo León, Chihuahua y Baja California, según datos del Instituto de Salud para el Bienestar (INSABI) y el ISSSTE.
Aunque por años se asumió como una enfermedad de adultos mayores, cada vez más personas jóvenes son diagnosticadas en etapas avanzadas.
“En ciudades como Monterrey o la CDMX se combinan varios factores: alta ingesta de carnes procesadas, bajo consumo de fibra, sedentarismo, estrés y sobrepeso. Todo eso genera inflamación crónica, que es terreno fértil para el cáncer colorrectal”, explica la oncóloga Julieta Gómez Ávalos.
El cirujano colorrectal Guillermo Colín Rojas lo resume así: “Es un cáncer vinculado a ciudades con estilo de vida occidentalizado. La comida rápida, el microondas, la jornada larga y el poco tiempo para cocinar están pasando factura”.
Dolor abdominal, diarrea, estreñimiento, sangrado leve… muchos lo confunden con colon irritable.
“El problema es que se automedican o les dan tratamientos repetidos sin investigar más. El resultado: diagnósticos tardíos”, advierte Colín Rojas.
“La mayoría de los pacientes en México llegan en etapas avanzadas. Eso reduce mucho las posibilidades de curación”, agrega Gómez Ávalos.
Aunque las guías internacionales recomiendan realizar una colonoscopía preventiva a los 45 años, los especialistas coinciden en que eso está cambiando.
“Si tienes sobrepeso, antecedentes familiares, síntomas digestivos persistentes o mala dieta, deberías hacerte estudios preventivos, aunque tengas 30 o 35”, aconseja Colín Rojas.
“No duele. Se hace con sedación, es ambulatoria y toma menos de una hora. Lo más incómodo es la preparación previa”, explica Colín.
El estudio permite detectar y extirpar pólipos antes de que se vuelvan malignos. La recomendación oficial en México es realizarla a partir de los 45 años si no hay factores de riesgo, o antes si hay antecedentes familiares.
5 señales que no debes ignorar: