Agencia Uno TV. Octubre 16, 2024.
Los pastes son una deliciosa tradición culinaria mexicana con una interesante historia y, aunque hoy en día se disfrutan en todo el país, sus orígenes se remontan a la Comarca Minera del estado de Hidalgo.
Este 2024 cumplen 200 años de historia, por lo que Mineral del Monte, municipio de aquella entidad, festejó creando un ejemplar de tamaño monumental.
Fue a medio día del domingo 13 de octubre del 2024 que un grupo de panaderos y cocineros se dieron cita en el municipio de Mineral del Monte, Hidalgo, para comenzar a preparar un enorme paste que midió más de cuatro metros de largo y pesó 200 kilos.
Pasadas las 16:00 horas, el platillo más emblemático del estado quedó listo, por lo que comenzaron a partirlo con la intención de que todos los asistentes a dicho evento pudieran probar un bocado de dos siglos de historia gastronómica.
Sus orígenes se remontan a la Comarca Minera de Hidalgo, y su historia comienza en el siglo XIX, durante la época de la fiebre del oro en México. En ese entonces, llegaron a la región numerosos mineros ingleses, quienes trajeron consigo sus costumbres y tradiciones culinarias, entre ellas los famosos “cornish pasties”.
Se trata de unas empanadas de rellenas con carne, papas y cebollas.
Los extranjeros encontraron en estos platillos una comida práctica y nutritiva para llevar al trabajo, ya que eran fáciles de transportar y se mantenían calientes por mucho tiempo.
Los mexicanos, siempre dispuestos a adaptar nuevas tradiciones, no tardaron en adoptar esta costumbre y darle su propio toque; por esta razón, sustituyeron los ingredientes por productos locales como:
Además, se modificó la forma, haciéndolos más grandes y cerrándolos con una trenza, que servía para sujetarlos y comerlos sin ensuciarse.
Con el tiempo se fueron popularizando en toda la región de Hidalgo y, posteriormente, en todo México. Hoy en día son una parte esencial de la gastronomía mexicana y se pueden encontrar en diferentes versiones y rellenos.
Desde los humildes inicios como comida de mineros, los pastes han evolucionado hasta convertirse en un símbolo de la cultura nacional, y su historia refleja la fusión de tradiciones culinarias y la capacidad de los paisanos para adaptar y enriquecer los sabores extranjeros.
Las empanadas tienen un origen más amplio y se encuentran en diversas culturas alrededor del mundo. En América Latina, tienen una larga tradición y existen numerosas variantes regionales.
Su preparación puede variar, pero generalmente se cocinan los ingredientes del relleno antes de envolverlos en la masa, la cual puede ser frita u horneada, y la forma puede ser redonda, triangular o cuadrada.
El relleno de los pastes lleva papa, carne, cebolla y chile, aunque existen variaciones; por su parte, los rellenos de las empanadas son mucho más variados y pueden incluir carnes, mariscos, quesos, verduras, frutas y hasta dulces.
La masa de la receta hidalguense tiende a ser más gruesa y hojaldrada, mientras que la de las empanadas puede ser más delgada.
La principal diferencia es que, en un paste, los ingredientes del relleno se colocan crudos dentro de la masa y se hornean juntos; esto permite que todos los sabores se mezclen y se cocinen al mismo tiempo, mientras que, en una empanada puedes poner los guisados ya concluidos.