Agencia Excélsior. Junio 28, 2024.
El estudio de los homínidos les ha permitido a los científicos descubrir cómo ocurrió la evolución de los seres humanos, además de algunos otros secretos, cómo el origen de algunas enfermedades o cómo era vivir hace miles de años.
Fue precisamente a través de estas investigaciones que los expertos lograron descubrir el primer caso de síndrome de Down en neandertales, lo que además genera la hipótesis de que el hombre primitivo cuidó de los vulnerables, además de que podrían haber sentido compasión por ellos.
Los expertos de la Universidad de Alcalá, en España, analizaron un pequeño fragmento de cráneo de una niña de seis años a la que llamaron ‘Tina’ que vivió hace más de mil 450 años y descubrió que el fósil tenía características que actualmente se han detectado en niños con este trastorno genético.
De acuerdo con el análisis, Tina padecía una patología congénita en el oído interno que está relacionada con el trastorno genético y probablemente le provocó una pérdida auditiva grave, además de vértigo.
Lo más impresionante de este hallazgo es que revela que los neandertales eran capaces de brindar atención y apoyo altruistas a integrantes vulnerables de su grupo social, ya que Tina sobrevivió varios años tras su nacimiento.
Los fósiles fueron encontrados en la Cova Negra, un yacimiento rupestre situado en Valencia, que fue excavado entre 1929 y 2017 en donde los investigadores analizaron recientemente restos encontrados durante una excavación de 1989 y descubrieron tres nuevos fósiles que anteriormente habían pasado desapercibidos.
El equipo cree que tienen entre 146 mil y 273 mil años, y en los que utilizaron tomografía microcomputarizada en el fósil, una técnica de imágenes en 3D que utiliza rayos X para ver el interior de un objeto, corte por corte.
“La patología que padecía este individuo provocó síntomas altamente incapacitantes, incluyendo, como mínimo, sordera total, ataques graves de vértigo e incapacidad para mantener el equilibrio”, afirmó el Dr. Conde-Valverde, coautor del estudio.
El descubrimiento de Tina representa el caso más antiguo conocido de síndrome de Down y demuestra que la diversidad observada en los humanos modernos ya estaba presente en tiempos prehistóricos, lo que garantiza que la historia de la evolución humana los incluye a todos.