Agencia Uno TV. Noviembre 26, 2024.
Ahora encontrar perros en los objetos perdidos en Japón se puede presentar sin ningún problema; atrás quedó cuando sólo se podían buscar paraguas o llaves, pues es la autoridad de ese país quien se está poniendo las pilas para que el área de objetos perdidos sea una opción dónde la esperanza de búsqueda tenga un final feliz.
La policía de Tokio es quien se encargará de encontrar perros en los objetos perdidos en Japón; aunque no es una tarea muy complicada como se pudiera pensar, pues en el país asiático los objetos perdidos raramente están mucho tiempo alejados de sus propietarios, incluso en una megaciudad como Tokio, con una población de 14 millones de habitantes.
“Los visitantes extranjeros a menudo se sorprenden de recuperar sus pertenencias”, dice Hiroshi Fujii, un guía turístico de 67 años, hablando del enorme centro de objetos perdidos de la policía de Tokio.
En este país asiático, informar de los objetos encontrados en espacios públicos es un “rasgo nacional”, explica Hiroshi Fujii a la agencia AFP. La forma de trabajar es la siguiente:
Un 80% del personal del centro policial, en el distrito de Iidabashi, se asegura de organizar bien los artículos mediante un sistema de base de datos
Todo objeto queda debidamente etiquetado y clasificado, para acelerar el retorno a su propietario.
Además de encontrar perros en los objetos perdidos en Japón, el director del centro policial, en el distrito de Iidabashi, Harumi Shoji comenta que los objetos más perdidos son:
Pero en las comisarías también se han entregado otro tipo de mascotas como gatos, iguanas y ardillas voladoras. Los agentes cuidan de estos ejemplares con gran sensibilidad, consultando libros, artículos en línea o incluso recibiendo la recomendación de veterinarios.
El año pasado, la policía metropolitana de Tokio recibió más de 4 millones de objetos perdidos como carteras, teléfonos o documentos importantes. Alrededor del 70% de ellos regresaron a manos de sus propietarios.
Solo en una tarde, decenas de personas suelen acudir para recoger o buscar sus objetos perdidos al centro, que recibe los artículos entregados del personal de las estaciones ferroviarias o en las comisarías de Tokio si no son reclamados en el transcurso de dos semanas.
Si en un plazo de 3 meses nadie reclama el objeto en el centro policial, este es vendido o desechado. El número de artículos perdidos que pasan por el centro aumenta por el número récord de turistas que acuden a Japón después de la pandemia, y por el hecho de que los dispositivos electrónicos son cada vez más pequeños, afirma Shoji.
Por ejemplo, los auriculares inalámbricos o los ventiladores portátiles de mano son artículos cada vez más frecuentes en el centro de objetos perdidos, que lleva en marcha desde los años 1950.