Agencia Uno TV. Noviembre 08, 2024.
Uno de cada 10 bebés que nacen en el mundo es prematuro, y cada 40 segundos uno de ellos pierde la vida. Sin embargo, una nutrición adecuada desde las primeras horas posteriores al nacimiento, puede ser la diferencia entre la vida y la muerte en los menores que llegan al mundo antes de las 37 semanas de gestación, así lo dieron a conocer especialistas durante una conferencia de prensa este miércoles.
Dado que los bebés prematuros enfrentan serios riesgos al momento del nacimiento, estos deben ser tratados en las Unidades de Terapia Intensiva Neonatales (UCIN), donde deben recibir una nutrición adecuada para el fortalecimiento de su sistema inmune, lo cual ayuda a prevenir infecciones graves como la sepsis.
Una forma de garantizar que los bebés prematuros tengan una buena nutrición es mediante la alimentación parenteral, la cual proporciona nutrientes de forma intravenosa, indicó Sarai Ugalde, especialista en Educación Clínica para Baxter Latinoamérica Norte.
Un correcto tratamiento nutricional en los bebés prematuros es de suma importancia ya que estos bebés no solo tienen consecuencias físicas como daños en el cerebro, corazón, intestino, riñones, tubo digestivo y retina, sino que también pueden desarrollar problemas emocionales, de aprendizaje, estigma social, falta de inclusión y aceptación.
Entre los principales riesgos que enfrenta un bebé que nació antes o en la semana 37 y no en la 42 como debe ser, puede enfrentar problemas de salud como:
Las constantes amenazas a la salud de los bebés que llegan al mundo antes de las 37 semanas de gestación, hace necesario su tratamiento en Terapia Intensiva Neonatal, donde especialistas en neonatología, neurología, rehabilitación, neumología, oftalmología y cardiología, trabajan en conjunto para que el bebé se estabilice y alcance un peso mínimo de 1.8kg.
Entre los factores de riesgo para el nacimiento prematuro se encuentran:
Además, las madres menores de 18 años o mayores de 35 también se enfrentan a un mayor riesgo de tener bebés prematuros.
Los partos prematuros se pueden prevenir si la mujer embarazada se nutre adecuadamente, mantiene un óptimo estado emocional, acude a revisión mensual con su especialista, y evita el consumo de tabaco y alcohol.