Agencia Marca. Abril 08, 2025.
Eegir al jugador franquicia “definitivo” de la NFL no es tarea fácil con tanto talento establecido y emergente en la liga. Cuando se piensa en el número uno de la NFL, a uno le vienen a la cabeza muchos jugadores, como Patrick Mahomes, Micah Parsons, Jalen Hurts, Justin Jefferson o Aaron Donald.
Pero según Bucky Brooks, de NFL.com, el linebacker de los Dallas Cowboys, que se convertirá en el jugador mejor pagado que no es quarterback, es la pieza central “definitiva” para construir una franquicia.
“Micah Parsons es la fuerza híbrida definitiva de primera línea, que sobresale como linebacker fuera del balón y cazamariscales en la línea de golpeo en un esquema que le permite florecer como defensor de ‘ver balón, conseguir balón'”, escribe Brooks
Después, añade: “Un especialista en jugadas explosivas con un motor de altas revoluciones y un espíritu competitivo de élite, el profesional de quinto año abruma a sus oponentes con energía y pasión.
Si a eso le añadimos sus habilidades de élite como creador de juego, es difícil encontrar una mejor estrella sobre la que construir que el eterno All-Pro de Dallas.”
En apenas cuatro temporadas, Parsons se ha convertido rápidamente en uno de los defensores más dominantes y versátiles de la NFL. Ha sido cuatro veces Pro Bowler y dos veces All-Pro. Se ha consolidado como un jugador que cambia el juego en cada jugada.
Parsons ha registrado al menos 12.0 capturas en cada una de sus primeras cuatro temporadas, demostrando su capacidad de élite para presionar al pasador. Su combinación de velocidad, fuerza e inteligencia futbolística le permite interrumpir los ataques de múltiples maneras.
Más allá de su destreza en el pass-rush, Parsons es increíblemente versátil, sobresaliendo tanto como edge rusher como en la cobertura. Su capacidad para impactar el juego desde múltiples posiciones lo convierte en un arma única para cualquier defensa.
Con su rendimiento constante, liderazgo y un conjunto de habilidades poco comunes, Parsons es el jugador perfecto para que una franquicia se construya a su alrededor, ofreciendo estabilidad a largo plazo y el potencial de un éxito sostenido.