Agencia Infobae.
En medio de recientes polémicas, el Príncipe Harry ha dado un paso al frente en su batalla legal para restaurar la protección policial que le fue retirada tras abandonar sus funciones reales hace tres años. El duque de Sussex, de 39 años, compartió su declaración durante en un juzgado en Londres, expresando su preocupación por la seguridad de su esposa Meghan Markle y sus hijos en el Reino Unido.
En una audiencia de tres días, el equipo legal de Harry divulgó una declaración del Príncipe, que, a pesar de no estar físicamente en el tribunal, su voz se dejó escuchar fuerte y clara, asegurando que sigue considerando su “hogar” a su país natal. “El Reino Unido es fundamental para la herencia de mis hijos y un lugar en el que quiero que se sientan como en casa tanto como donde viven actualmente en Estados Unidos”, subrayó después de lamentar la necesidad de abandonar la realeza y el país en 2020.
El duque de Sussex, padre de Archie y Lilibet junto a Meghan, expresó su negativa a exponerse a sí mismo y a los suyos a situaciones riesgosas al pisar suelo británico. “No puedo poner a mi esposa en peligro de esa manera, y dadas mis experiencias en la vida, soy reacio a ponerme innecesariamente en peligro también”, afirmó.
Tras renunciar a la realeza, Harry no tuvo más remedio que optar por la solución de pagar los gastos de seguridad para él, su esposa y sus dos pequeños hijos. Sin embargo, la oferta fue nuevamente rechazada por el Comité Ejecutivo para la Protección de la Realeza y las Figuras Públicas (RAVEC, por sus siglas en inglés), eliminando así su derecho automático a la protección policial garantizada.
El duque y la duquesa de Sussex se mudaron a California en 2020 y, desde entonces, solo ha visitado el Reino Unido en una ocasión: durante el Jubileo de Platino de la difunta reina Isabel II en 2022. A pesar de ello, Harry insiste en la importancia de mantener su seguridad durante sus visitas a su tierra natal. Pero el Ministerio del Interior del país británico ha argumentado que su posición cambiada y su residencia en el extranjero la mayor parte del tiempo justifican la decisión de retirar la protección.
Los abogados de Harry sostuvieron que el RAVEC debería “haber considerado el ‘impacto’ que tendría un ataque exitoso contra el demandante, teniendo en cuenta su estatus, antecedentes y perfil dentro de la familia real, en la que nació y que tendrá durante el resto de su vida”, argumentando que ello podría tener consecuencias negativas en la reputación del Reino Unido.
A finales del pasado año, Harry obtuvo permiso para cuestionar esta decisión en los tribunales. Una medida que su abogada, Shaheed Fatima, ha considerado “ilegítima e injusta” en la primera vista de este martes, según Reuters.
Así, la parte demandante defenderá que el duque de Sussex y su familia no se sintieron seguros en su última visita en Londres, en la que asistieron a un evento benéfico y fueron perseguidos por los paparazzi. No es la primera vez que Harry denuncia la actuación intrusiva de la prensa, a la que culpa por la muerte de su madre, la princesa Diana.
“Este caso va del derecho a la seguridad de una persona”, ha expresado Fátima, un derecho que la abogada considera de gran importancia. La letrada defendió que el RAVEC no habría aportado ninguna razón por la que excluir a Harry de la protección policial.
De hecho, en el año 2022 la Policía Metropolitana aseguró que la duquesa de Sussex, Megan Markle, había recibido serias amenazas por parte de grupos de extrema derecha.