Agencia Revista Clase. Octubre 01, 2024.
Meghan Markle, la duquesa de Sussex y ex actriz de Hollywood, ha sido objeto de atención mediática desde que se unió a la familia real británica en 2018. Su vida pública ha estado marcada por una mezcla de admiración y controversia, especialmente tras su decisión de renunciar a sus funciones reales en el llamado “Megxit”. Desde entonces, ha enfrentado críticas y especulaciones sobre su comportamiento, tanto como miembro de la realeza como en su nueva vida en California.
Los rumores en torno a su liderazgo no son la excepción. Meghan Markle ha abordado las duras críticas que han surgido en torno a su comportamiento como jefa, después de que varios ex empleados la llamaran “Duquesa Difícil”. Este apodo, que la retrata como una figura temible, resurge en un contexto donde sus antiguos colaboradores han compartido experiencias tanto positivas como negativas de su tiempo con ella y el príncipe Harry.
Recientemente, se ha reiterado que Markle es acusada de “menospreciar a la gente” y de no aceptar consejos, lo que alimenta el estigma de ser una jefa difícil, según un reciente artículo de The Hollywood Reporter, que cita personas relacionadas al tema. Este tipo de quejas no son nuevas, ya que en 2021 se abrió una investigación por el trato que la duquesa proporcionó a sus empleados en el palacio de Kensington.
En el pasado, la duquesa de Sussex ha reflexionado sobre este tipo de críticas, especialmente sobre la etiqueta de “difícil” aplicada a las mujeres con carácter fuerte, de forma que, a manera de reivindicación, dio una opinión sobre el apodo “la duquesa difícil”.
En su análisis, criticó cómo este término se utiliza erróneamente como un eufemismo para descalificar a mujeres competentes. “Llamar a una mujer ‘difícil’ es una forma de quitarle poder”, afirmó, dejando claro su descontento con los comentarios en su contra.
En el episodio, Meghan reflexiona sobre por qué las mujeres a menudo son etiquetadas de manera negativa, comentando: “Cuando estas personas utilizan esa palabra tan cargada, están insinuando que esta mujer es ‘difícil’. En realidad, esto no es más que un eufemismo, o quizás ni siquiera eso; es simplemente una forma encubierta de referirse a ella de manera despectiva.”
Más adelante en el podcast, Markle continúa: “Tal vez lo cierto sea que llamar a una mujer ‘difícil’ es, en muchas ocasiones, una desviación que oculta sus cualidades verdaderamente asombrosas: su persistencia, su fortaleza, su perseverancia y su firmeza de opinión. La duquesa subraya que ser calificada como “difícil” es un insulto que desestima el valor de una mujer.
A pesar de las críticas, algunos ex empleados han salido a defenderla, compartiendo anécdotas positivas que contrastan con las declaraciones negativas de otros. Sin embargo, la controversia continúa, especialmente con renuncias recientes de miembros de su equipo, que alimentan la narrativa de que el ambiente de trabajo con los Sussex puede ser tenso.
En ese contexto, Meghan Markle sigue firme en su postura, buscando redefinir lo que significa ser una mujer fuerte en un mundo que a menudo utiliza términos peyorativos para desacreditar su influencia.