Agencia El Universal. Noviembre 14, 2024.
El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, prometió en Bruselas, Bélgica, una “respuesta firme” a la presencia de tropas norcoreanas en el conflicto entre Rusia y Ucrania.
Coincidiendo con un ataque balístico ruso a Kiev, Blinken inició este miércoles una serie de encuentros en Bruselas para defender la ayuda a Ucrania.
La jornada arrancó con una reunión con el secretario general de la OTAN, Mark Rute.
“Tuvimos una reunión sobre el apoyo a Ucrania (…) y este nuevo elemento, tropas de Corea del Norte inyectadas en la batalla, y casi literalmente en combate, que exige y tendrá una respuesta firme”, dijo.
Estados Unidos sostiene que tropas de Corea del Norte están desplegadas en operaciones de combate en la región rusa de Kursk, donde el ejército ucraniano lanzó en agosto una ofensiva y mantiene ocupada una parte del territorio.
El miércoles, el servicio de inteligencia de Corea del Sur afirmó precisamente que militares norcoreanos ya “participan en combates” en Kursk, donde fueron desplegados hace dos semanas.
En la capital belga, Blinken también tiene agendadas reuniones con el canciller ucraniano, Andrii Sybiga, con el jefe saliente de la diplomacia de la UE, Josep Borrell, y con su sucesora designada, Kaja Kallas.
En su audiencia de confirmación ante el Parlamento Europeo, Kallas, exprimer ministra de Estonia, había enfatizado el martes que la UE debe mantener el apoyo a Ucrania “el tiempo que sea necesario”.
El viaje del Blinken a Bruselas se produce cuando Kiev y sus socios europeos temen seriamente que el virtual presidente electo de EU, Donald Trump, corte el grifo de la ayuda.
Trump ya mantuvo un contacto telefónico con el presidente de Ucrania, Volodimir Zelensky. Según el diario Washington Post, también se comunicó con el presidente de Rusia, Vladimir Putin, aunque el gobierno ruso ha desmentido esa versión.
Durante la campaña electoral, Trump prometió poner punto final a la guerra entre Rusia y Ucrania en apenas un día, incluso antes de asumir el poder. Aunque no dijo exactamente cómo lo haría.
Trump también ha sugerido que su gobierno podría limitar las multimillonarias ayudas a Ucrania, al cuestionar esos aportes dado que la guerra está según él en “punto muerto”.
En el frente oriental ucraniano, Rusia conquistó cientos de kilómetros cuadrados en octubre, y amenaza ciudades de importancia estratégica, como Pokrovsk.
No sólo eso: el ejército ruso intensificó desde inicios de octubre los ataques con drones contra la capital ucraniana, y este mismo miércoles fue aún más allá lanzando este tipo de aparatos junto con misiles.
“Las fuerzas armadas rusas lanzaron un ataque combinado de misiles y drones contra Kiev, por primera vez en 73 días”, destacó la administración militar de la capital.
Según la misma fuente, el ataque duró más de dos horas, pero no causó muertos gracias a las defensas antiaéreas.
El actual presidente de Estados Unidos, Joe Biden, busca acelerar la entrega de ayuda militar a Ucrania y pretende implementar mecanismos para que los europeos se encarguen del relevo.
Actualmente quedan unos 9.200 millones de dólares de la partida presupuestaria aprobada en la primavera boreal.
De ese total, 7.100 millones de dólares proceden de las reservas de armas estadounidenses y 2.100 millones USD están destinados a financiar contratos de compra de armas, según el Pentágono.
Fuentes del gobierno en Washington adelantaron que la administración pretende utilizar la totalidad de esos montantes.
La ministra alemana de Relaciones Exteriores, Annalena Baerbock, ha advertido del riesgo de que Putin aproveche la transición política en Estados Unidos para beneficiarse.
Todo lo que Europa pueda aportar a Ucrania “debe ser movilizado ahora’, declaró Baerbock el lunes.