Agencia Excélsior. Abril 30, 2024.
La administración del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, está preparando un cambio histórico en la política de drogas de Estados Unidos al anunciar próximamente una norma provisional que reclassificará el cannabis, marcando la primera vez en más de 50 años que la droga será reevaluada desde que se promulgó la Ley de Sustancias Controladas. Cuatro fuentes con conocimiento de la decisión confirmaron esto a la cadena NBC y a la agencia AP.
Se espera que la Administración para el Control de Drogas (DEA) apruebe una opinión del Departamento de Salud y Servicios Humanos que sugiere reclasificar el cannabis de la Lista I, que incluye sustancias como la heroína y las metanfetaminas, a la Lista III, que es menos restrictiva y abarca sustancias como Tylenol con codeína y esteroides. Esta reclassificación marcaría un hito al reconocer los posibles beneficios médicos del cannabis y abriría la puerta a una investigación más seria sobre estos beneficios.
El Departamento de Justicia está trabajando en esta regla, según un funcionario de la administración Biden, aunque no han proporcionado más detalles por el momento.
Desde 1971, la mariguana ha sido clasificada junto con drogas consideradas sin uso médico aceptado y con alto potencial de abuso. La reclassificación permitiría que el cannabis fuera estudiado más a fondo para identificar sus beneficios médicos concretos, lo que podría llevar a la participación de compañías farmacéuticas en su venta y distribución en estados donde es legal.
Además de los beneficios médicos, la reclassificación tendría un impacto económico significativo. La industria del cannabis, valuada en 34 mil millones de dólares, se beneficiaría al eliminar importantes cargas fiscales, como la Sección 280E del código de los Servicios de Impuestos Internos, que actualmente impide a las empresas deducir gastos comerciales ordinarios.
Por otro lado, la medida también podría reducir el mercado negro que ha persistido a pesar de la legalización en varios estados, como Nueva York y California, donde el mercado legal ha sido afectado por la competencia ilegal.
La decisión de revisar la clasificación del cannabis fue ordenada por el presidente Biden en octubre de 2022. Científicos federales concluyeron que existen evidencias creíbles de los beneficios médicos del cannabis y que presenta riesgos menores para la salud en comparación con otras sustancias controladas.
El presidente Biden mencionó la mariguana por primera vez en un discurso sobre el Estado de la Unión esta primavera, destacando el proceso de revisión federal y enfatizando que “nadie debería ser encarcelado por consumir o poseer mariguana”.
En la administración anterior, bajo el presidente Barack Obama, la Casa Blanca se oponía a la legalización de la mariguana debido a preocupaciones sobre la salud y seguridad de los estadounidenses. Sin embargo, figuras como Jim Cole, quien desempeñó un papel importante en el mercado moderno de la mariguana con el Cole Memo en 2013, han respaldado reformas que reduzcan la intervención federal en estados que legalizan la marihuana.
A pesar de la reclassificación propuesta, hay voces críticas. Kevin Sabet, presidente de Smart Approaches to Marijuana y ex asesor de la administración Obama, ha expresado preocupaciones sobre el impacto en los jóvenes y la percepción de la mariguana como menos peligrosa de lo que realmente es.
Los investigadores también han señalado preocupaciones sobre la mariguana de alta potencia y su relación con trastornos psiquiátricos, especialmente en hombres jóvenes.
Una vez que la DEA formalice su anuncio, la industria del cannabis verá beneficios inmediatos, pero habrá un período de revisión pública que podría llevar a desafíos y cambios en la propuesta. Además, el Congreso podría revocar la reclassificación bajo la Ley de Revisión del Congreso, aunque esto requeriría un amplio apoyo bipartidista.
A pesar de las divisiones políticas, ha habido un creciente apoyo bipartidista a las reformas sobre la mariguana, reflejado en encuestas que muestran un amplio respaldo público a la legalización para usos médicos y recreativos. El Congreso también está considerando medidas adicionales para apoyar el crecimiento de los negocios legales de mariguana y abordar preocupaciones relacionadas con antecedentes penales y justicia económica.