Agencia Excélsior. Diciembre 09, 2024.
Los ingresos por venta de armamento aumentaron en todas las regiones del mundo en 2023 debido a los contextos bélicos, con incremento particularmente pronunciados entre las empresas con sede en Rusia y Oriente Medio.
En general, los productores más pequeños respondieron con mayor eficiencia a la nueva demanda vinculada a las guerras en Gaza y Ucrania, las crecientes tensiones en el este de Asia y los programas de rearme, según el Instituto Internacional de Investigación para la Paz de Estocolmo (Sipri).
Según el informe, las 100 principales empresas de dicha industria aumentaron su producción y su fuerza laboral el año pasado.
De esas 100, 41 están ubicadas en Estados Unidos y registraron ingresos por armas por 317 mil millones de dólares, la mitad de los ingresos totales de ese listado.
Además, reportaron 2.5% más en ganancias que en el año 2022.
Desde 2018, las cinco principales empresas del Top 100 tienen su sede en Estados Unidos.
En tanto, el Sipri afirmó que los ingresos combinados por venta de armas de las 27 empresas del Top 100 con sede en Europa (excluida Rusia) totalizaron 133 mil millones de dólares en 2023.
Es decir, en contraste, esto fue solo 0.2% más que en 2022, el aumento más pequeño en cualquier región del mundo.
Sin embargo, detrás de la baja cifra de crecimiento hay un panorama más matizado.
Las empresas armamentísticas europeas que producen sistemas de armas complejos trabajaron principalmente en contratos más antiguos durante 2023 y, en consecuencia, sus ingresos del año no reflejan la afluencia de pedidos.
Por su parte, las empresas rusas también salieron beneficiadas.
Las dos firmas de ese país incluidas en el Top 100 vieron aumentar sus ingresos combinados en 40% hasta alcanzar una cifra estimada de 25 mil 500 millones de dólares.
“Esto se debió casi en su totalidad al aumento de 49% de los ingresos por armamento registrados por Rostec, un holding estatal que controla a muchos productores de armas, incluidos siete que figuraban anteriormente en el Top 100 y de los que no se pudieron obtener datos individuales sobre los ingresos”, según el estudio publicado esta semana.
En tanto, seis de las 100 principales empresas de armamento con sede en Oriente Medio el año pasado.
Sus ingresos combinados por armamento crecieron un 18% hasta los 19 mil 600 millones de dólares.
Con el estallido de la guerra en Gaza, los ingresos por armamento de las tres empresas con sede en Israel que figuran en el Top 100 alcanzaron los 13 mil 600 millones de dólares.
Esta fue la cifra más alta jamás registrada por empresas israelíes en el Top 100 del Sipri.
Por su parte, tres empresas con sede en Turquía vieron crecer sus ingresos por armamento 24% hasta los seis mil millones de dólares, beneficiándose de las exportaciones impulsadas por la guerra en Ucrania y de la continua campaña del gobierno turco para lograr la autosuficiencia en la producción de armamento.
Lorenzo Scarazzato, investigador del Programa de Gasto Militar y Producción de Armamentos del SIPRI, explicó para el informe que “en 2023 se produjo un marcado aumento de los ingresos por armamento, y es probable que esto se registre en la evaluación que se haga de 2024”,
Asimismo, el experto expresó que estos escenarios económicos le dan muy buenas perspectivas a las empresas armamentistas para aumentar la producción y “ser optimistas ante las ventas futuras”.
Las cifras de Rusia, que lanzó en 2022 una invasión contra Ucrania, indican que esta economía está cada vez más orientada hacia la guerra.
Los fabricantes de Oriente Medio registraron un incremento promedio de las ventas de 18%.
Tres compañías israelíes reportaron un aumento de 15%.