Agencia Excélsior. Enero 08, 2025.
El guatemalteco Sebastián Zapeta, acusado de quemar a una mujer en el metro de Nueva York el pasado 22 de diciembre, se declaró este martes no culpable de los cuatro cargos que afronta, entre ellos uno de asesinato en primer grado que podría derivar en cadena perpetua.
Zapeta, de 33 años, compareció ante un juez que ordenó su permanencia en la prisión de Rikers Island sin derecho a fianza. También se le imputan dos cargos de asesinato en segundo grado y uno de incendio provocado, luego de que presuntamente prendiera fuego a Debrina Kawam, de 57 años, mientras dormía en la línea F del metro en Coney Island.
Durante la breve audiencia, el acusado mantuvo el rostro serio mientras el magistrado leía los cargos. Según la Fiscalía de Brooklyn, se convocó a un gran jurado para confirmar la acusación formal, siguiendo la ley de Nueva York en casos de delitos graves. La próxima comparecencia de Zapeta ante la justicia se fijó para el 12 de marzo.
El incidente, registrado en video, muestra cómo un hombre quemó a Kawam y luego abandonó el vagón, sentándose en un banco en el andén para observar las llamas. En lugar de socorrer a la víctima, pareció agitar una camisa para avivar el fuego.
La Fiscalía afirma que, al ser interrogado, Zapeta reconoció aparecer en las imágenes, pero dijo que había consumido mucho alcohol y “no recordaba qué había pasado”. También se informó que fue deportado en 2018 por ingresar ilegalmente a Estados Unidos, aunque retornó en fecha no precisada.
Descrito como un “sintecho con aparentes problemas de alcoholismo”, Zapeta residía en albergues públicos y recibía tratamiento por adicciones. La violencia del ataque ha suscitado alarma sobre la seguridad en el metro, donde se han reportado agresiones graves recientemente, incluido el caso de un hombre que empujó a otro a las vías.
Con la acusación formal, las autoridades esperan esclarecer los motivos del suceso y determinar responsabilidades, según el marco legal estatal. De momento, la defensa de Zapeta mantiene la inocencia de su cliente.
La detención y acusación de Zapeta también ha cobrado relevancia en algunos medios conservadores, que lo presentan como prueba de la presunta relación entre migración e inseguridad. El presidente electo, Donald Trump, ha reiterado su compromiso con “la mayor deportación de la historia” al vincular la inmigración indocumentada con la delincuencia, alimentando el debate.