Agencia Excélsior. Diciembre 13, 2024.
La tumba de Hafez al-Asad, padre del derrocado presidente sirio Bashar al-Asad, fue incendiada en su ciudad natal de Qardaha, según imágenes de vídeo tomadas el miércoles por la AFP que muestran a combatientes rebeldes y jóvenes observando cómo arde. La oenegé de información Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH) aseguró a la agencia que los rebeldes prendieron fuego al mausoleo, ubicado en el corazón de la comunidad alauita de Al-Asad en Latakia, en el noroeste.
Según el Observatorio, los responsables del ataque se hicieron pasar por miembros del Mando de Operaciones Militares, una coalición insurgente que lideró la ofensiva contra el régimen de Bashar al-Asad.
“Hombres armados que se hicieron pasar por (hombres) del Mando de Operaciones Militares se dispersaron por la ciudad de Al Qardaha y prendieron fuego a la tumba de Hafez en la noche del martes al miércoles, además de atacar otras tumbas”, señaló la ONG, con sede en el Reino Unido, pero con amplia presencia en terreno.
El mausoleo, conocido por su techo blanco adornado con textos coránicos y un suelo de mármol que alberga los ataúdes de Hafez y su hijo Basel, sufrió daños aún no especificados. Basel, el primogénito de Hafez, falleció en un accidente automovilístico en 1994 a los 32 años.
El ataque ocurrió poco después de una reunión entre líderes del Mando de Operaciones Militares y figuras destacadas de Al Qardaha, incluidos jeques tribales de la minoría alauí, la rama chií del islam que profesa la familia Al Asad. Según el Observatorio, estas conversaciones buscaron “obtener su apoyo, restablecer la seguridad en la región, el desarme y la entrega de criminales buscados del antiguo régimen”.
Hafez al Asad gobernó Siria desde 1971 hasta su muerte en el verano del año 2000, consolidando un régimen autoritario basado en el control militar y la represión de la oposición. Su hijo Bashar asumió el poder tras su muerte, enfrentando durante más de una década un conflicto civil devastador que culminó con su derrocamiento.
El líder del nuevo poder sirio dijo este miércoles que los funcionarios del régimen de Bashar al Asad implicados en las torturas a los presos no serán amnistiados. Abu Mohamad al Jolani, que ahora emplea su verdadero nombre, Ahmed al Sharaa, hizo estos comentarios mientras numerosas familias siguen buscando a sus parientes en las cárceles, de donde fueron liberados miles de presos.
“No perdonaremos a quienes están implicados en la tortura y eliminación de los presos”, dijo el líder de la formación islamista Hayat Tahrir al Sham, principal componente de la rebelión que el domingo tomó Damasco y expulsó del poder a Asad, en el poder desde hacía 24 años.
En este esfuerzo por castigar a los culpables de torturas durante el represivo régimen anterior, Al Jolani instó a los países vecinos a que “entreguen a cualquiera de esos criminales que puedan haber huido, para que sean llevados ante la justicia”.